đŸƒâ€â™‚ïž CafĂ© y rendimiento deportivo đŸƒâ€â™€ïž

¿EXISTE RELACIÓN ENTRE TOMAR UN BUEN CAFÉ Y EL DEPORTE?

✅ SÍ

Existen numerosos estudios que demuestran que el café de especialidad, y no un café procesado, tiene muchos beneficios para el rendimiento deportivo y sobre todo para tu salud. Si es cierto que tenemos muy interiorizado que tomar un café antes de realizar nuestro entreno o ir a competir nos harå rendir mejor pero también debemos saber qué café tomar y cuando, es decir, controlar el "Timing" de la ingesta.

✋RECUERDA: "No todo el cafĂ© vale", al igual que "No todo el cafĂ© es cafeĂ­na".

Un buen café de especialidad en el rendimiento deportivo nos aportarå: 

🚀 Mejor capacidad de alerta.

 🚀 Menor cansancio y mejora la tolerancia al esfuerzo.

 🚀 Nos aporta buena cantidad de antioxidantes.

 🚀 Excelentes ácidos grasos de cadena media, los cuales son grandes prebióticos, estos no se digieren y nos protegen de patógenos que podemos llegar a consumir en nuestras comidas.

----- 

¿CUÁL ES EL MOMENTO PERFECTO PARA TOMAR MI CAFÉ?

❌Cuidado porque no por tomar 4 cafĂ©s diarios, estaremos obteniendo los beneficios anteriores.❌

âžĄïž Las dosis de cafeĂ­na necesarias para tener las sensaciones mencionadas de bienestar y mejora de la capacidad de alerta suelen ser menores que las necesarias para obtener otros efectos de la cafeĂ­na de carĂĄcter metabĂłlico como la movilizaciĂłn de grasa desde el tejido adiposo. La cafeĂ­na contenida en una o dos tazas de cafĂ© (80-200 mg) puede ser suficiente.

đŸ’„ El ejercicio fĂ­sico es “lipolĂ­tico” o movilizador de grasa durante el propio esfuerzo siempre que sea de una cierta duraciĂłn y no sobrepase unas intensidades.Se trata del ejercicio de carĂĄcter aerĂłbico, y aquĂ­ la cafeĂ­na parece potenciar este efecto de llegada de ĂĄcidos grasos desde las reservas del tejido adiposo, donde estĂĄn acumulados en cĂ©lulas llamadas “adipocitos”.

âžĄïž Se ha visto que tras el consumo del equivalente de unas dos tazas de cafĂ© en un espacio de tiempo de unos 60-90 minutos ya se aprecia en la sangre un incremento significativo de grasa circulante en forma de los llamados ĂĄcidos grasos libres (AGL) y pueden, en caso de realizarse ejercicio fĂ­sico, ser oxidados y utilizados en el mĂșsculo esquelĂ©tico.